La copa menstrual es un producto de higiene femenina que se inserta en la vagina para recoger el flujo menstrual, pero que, a diferencia de los tampones y las compresas, no absorbe el líquido, sino que lo almacena para ser vaciado posteriormente. Reutilizable y, normalmente, fabricada en goma, silicona o elastómero termoplástico, materiales que son hipoalergénicos y no causan irritaciones.
Una opción más económica y ecológica que ha ido ganando cada día más adeptas debido a su comodidad y al menor riesgo de infecciones, ayudando a mantener el equilibrio del pH vaginal y evitando el contacto con sustancias tóxicas.
Sin embargo, hay una cuestión que sigue preocupando a muchas mujeres y que hace que sean más reticentes a usarla: las fugas. Por eso, para que puedas disfrutar de todos sus beneficios y te sientas cómoda con ella, a continuación, te damos algunos consejos para que tu copa menstrual se ajuste correctamente a tu vagina y no sufras ningún inconveniente.
¿Cómo se coloca la copa menstrual?
Lo primero que debes tener claros son los pasos básicos a seguir para colocar correctamente tu copa menstrual:
- Esterilización: esteriliza la copa menstrual antes del primer uso y al final de cada ciclo. Para ello, solamente debes sumergirla en agua hirviendo durante 3 minutos. Después, guárdala en una bolsa de algodón hasta el siguiente ciclo.
- Lávate las manos: lávate bien las manos antes de manipular la copa para evitar la introducción de bacterias en la vagina.
- Elección del pliegue: prueba con diferentes pliegues para encontrar la forma que te resulte más cómoda y que mejor se adapte a tu cuerpo. Por ejemplo, en C o en V. Si notas que la copa no se abre por completo y que no hace vacío, intenta doblar la copa de otra manera.
- Retirar la copa menstrual: para liberar el vacío y saber si necesitas vaciarla, solamente tienes que pellizcar la base de la copa para romper el sellado y extraerla.
Causas comunes de las fugas y cómo evitarlas
Ahora que ya sabes cómo colocarla correctamente, a continuación, queremos explicarte cuáles son las causas más frecuentes de las fugas y algunos trucos y consejos para evitarlas:
1. Cambia de pliegue al introducir la copa
Si sueles hacer un pliegue en V para introducir la copa y no consigues que se abra correctamente, te recomendamos cambiar al pliegue en forma de C. De esta forma, evitarás que la copa se quede doblada. Si el cambio de pliegue te resulta incómodo, siempre puedes probar a usar lubricante para facilitar el proceso.
2. Asegúrate de que la copa esté completamente abierta
Para comprobar si la copa menstrual se ha abierto por completo:
- Introduce el dedo índice y el pulgar en la vagina para alcanzar la base de la copa (no el tallo).
- Gira suavemente la copa de adelante hacia atrás para asegurarte de que se encuentra bien desplegada.
- Pasa el dedo índice por el borde de la copa para confirmar que la forma es redonda u ovalada. Si es así, quiere decir que se ha abierto correctamente.
3. Verifica la posición de la copa menstrual
Hay que tener en cuenta que incluso si la copa está abierta, es posible que se produzcan fugas si no se encuentra bien colocada:
- La copa no debe estar demasiado adentro ni demasiado cerca del cuello del útero, ya que podría hacer que el flujo vaginal se saliera.
- Si crees que el cuello del útero ha podido quedar dentro de la copa, extráela ligeramente hacia afuera para corregir su posición.
4. Busca y conoce tu cérvix
La forma del canal vaginal y posición del cérvix son diferentes en cada persona, lo que influye en la manera en la que se adapta la copa menstrual. Para encontrar tu cérvix, sigue las siguientes indicaciones:
- Introduce un dedo en tu vagina y busca una zona ligeramente más firme, que suele ser el cérvix.
- Alinea la copa menstrual según la ubicación de tu cérvix y, de esta forma, evitarás fugas.
5. Revisa la talla de tu copa menstrual
Si la talla de tu copa menstrual no es la adecuada, no se ajustará bien a las paredes vaginales, lo que puede provocar fugas:
- Si después de varios ciclos probando de diferentes formas, se siguen produciendo fugas, inténtalo con una copa menstrual de otro tamaño, forma o firmeza para hasta encontrar la que mejor se adapte a ti.
